El riego por goteo en la agricultura moderna y de hortalizas
El riego por goteo es el sistema de riego más eficaz existente de aplicación de agua a una planta.
Los sistemas de riego más antiguos utilizaban la inundación de todo el suelo, lo que podía llegar a utilizar hasta 100 litros de agua por metros cuadrado (100 l/m2). Estos sistemas de riego eran tremendamente ineficaces ya que la cantidad de agua a utilizar era excesiva, se provocaba encharcamiento, lo que en algunos tipos de suelo es motivo de producción de enfermedades del cuello de raíz por pudrición.
A la lista de problemas generados por el encharcamiento podemos añadir la hipoxia radicular, lavado de nutrientes y, sobre todo, un uso excesivo del agua, un bien cada vez más escaso.
En la imagen de arriba se puede observar la raíz de una planta de tomates con hipoxia radicular (exceso de agua) y abajo se puede observar una raíz sana de tomate regada adecuadamente con riego por goteo.
En el sistema de riego por goteo se hace muy fácil controlar la cantidad de agua a aportar al suelo y a la planta y adecuar el aporte de agua a las necesidades reales de la planta.
Hoy en día, el agua es un bien escaso y cada vez más caro, pues cada vez se hace más costosa su ex-tracción de pozos, su transporte desde los puntos de embalse y su tratamiento para hacerlo útil para el consumo humano y su consumo agrícola.
El riego por goteo puede suponer una diferencia del 70% de reducción del consumo de agua comparado con un sistema de riego por inundación. El agua se aplica directamente a la raíz, minimizando las perdidas por evaporación, escorrentía y percolación.
Así mismo, a la hora de aplicar fertilizantes, la cantidad de fertilizante a aplicar es mucho menor que en un riego por inundación o aspersión y, además, te aseguras que el fertilizante va a la zona radicular y no fuera de su alcance. Evidentemente, la aplicación de fertilizantes se realiza directamente al agua de riego, pudiendo controlar a través de «equipos de control de riego» la cantidad de fertilizante que se quiere aplicar a la planta.
Igualmente, la energía es otro factor a tener en cuenta. Las electrobombas necesarias para el riego por goteo son de menos potencia que los que se usan para el riego por aspersión y por inundación. En consecuencia, el ahorro en el gasto de energía hace que el sistema sea también más eficiente y más rentable.
Cuando se controla bien la cantidad de agua que se aplica a la planta así como los fertilizantes conve-nientemente aplicados en niveles de conductividad y pH apropiados para el cultivo, la productividad mejora exponencialmente.
Las raíces se encuentran más oxigenadas y, por lo tanto, el sistema radicular es más fuerte y la planta más vigorosa. Como consecuencia de esto, la planta será más productiva, tendrá más producción de buena calidad y se encontrará más fuerte para resistir enfermedades.
Detalle de un cultivo de un tomate cherry en un invernadero con riego por goteo.
Otra de las ventajas del uso del riego por goteo, es la sostenibilidad ecológica y ambiental. La aportación de agua y fertilizantes con criterio y en los niveles apropiados, no solo mejora la producción y la calidad del fruto, sino que evita la contaminación del suelo y hace más sostenible el uso del agua, un bien preciado cada vez más escaso y caro.
Podemos concretar que el suso de sistemas de riego por goteo produce:
- AHORRO DE AGUA
- AHORRO DE FERTILIZANTES
- AHORRO DE ENERGÍA
- MEJOR PRODUCTIVIDAD
- SOSTENIBILIDAD AMBIENTAL Y ECOLÓGICA